14 Sep El Plan de Infraestructuras permite mantener abiertos tres centros infantiles de La Palma
Tres de las 10 escuelas infantiles radicadas en otros tantos municipios, cuya existencia está en peligro por la falta de financiación regional, podrán garantizar su continuidad el próximo año gracias a la ayuda del Plan Municipal de Infraestructuras y Servicios Sociales.
El Cabildo palmero, a través de la consejería que dirige Jorge González, “quiere colaborar, cooperar y ayudar a garantizar el servicio que se le presta a cientos de familias y a niños de cero a tres años en la Isla”. González explicaba así la “flexibilidad que hemos dado en el Plan para que cada ayuntamiento priorice las inversiones más necesarias”.
Los grupos de gobierno de los ayuntamientos de Puntallana, Breña Alta y Puntagorda no lo han dudado y han destinado sus fichas financieras en el Plan, cifradas en 34.700 euros, 54.489 y 33.000, respectivamente, al mantenimiento de estos servicios sociales, que en el caso de Puntagorda también destina casi unos 4.000 euros al mantenimiento de un servicio tutelado destinado a las personas adultas.
El consejero Jorge González detalló que “este es un ejemplo de política social” y expresó su satisfacción por este modelo de inversión en el Plan Municipal de Infraestructuras financiado íntegramente por las arcas del Cabildo palmero.
Asumir más gastos
El debate sobre la financiación de las escuelas infantiles, centrado meses atrás en la asunción de competencias y que generó un debate interno entre las consejerías regionales de Educación y Servicios Sociales, ha ido apagándose lentamente, puesto que los alcaldes han priorizado la búsqueda de soluciones mientras han seguido luchando en este sentido para hacerse oir a través de la Federación Canaria de Municipios (Fecam).
Más allá de una inevitable subida de las cuotas a las familias para acceder a este importante servicio, en el marco de las modificaciones aprobadas en los respectivos plenos municipales para rebajar los déficits y mantener las prestaciones, los alcaldes palmeros han reconocido el poco margen de actuación, más acusado con los recortes presupuestarios y la imposibilidad de acudir a nuevos endeudamientos.
Ante la gravedad de la situación, y aún reconociendo desde el Cabildo que lo deseable hubiera sido que el plan se destinase a la realización de obras con el fin de poder fomentar el empleo en La Palma, la realidad se ha impuesto para atender las necesidades más perentorias, entre las que figura el mantenimiento de los servicios que prestan las escuelas infantiles.
Los criterios de reparto de estos fondos públicos se consensuaron semanas atrás con los catorce ayuntamientos palmeros.